Escalada Invernal al Veleta por el Corredor y Fidel Fierro.

Realmente no creo que exista nada más valioso que el tiempo que se nos ha sido concedido para llenarnos de experiencias. Quien no se dé cuenta de esto está condenado a vivir en piloto automático. Si puedes moverte con libertad, usar tus manos y tus piernas, aprovecha en hacer todo lo que puedas con ellas. Hay gente que padece enfermedades que atacan a la memoria, la motricidad y que daría lo que fuera por estar en tu lugar. Puede que tu vida no te guste como está ahora. Puede que no estés donde quisieras estar o que no estés haciendo lo que más te gusta. Pero mientras todo eso sea un puente o ciclo de transición todo va a estar en su lugar. Si por el contrario, esa es tu vida y no estas poniendo nada de tu parte para que la situación cambie, busca ayuda.
Conozco personas que están temporalmente donde no quisieran pero con una meta en frente, con un destino, con un cambio motivador por delante. Es fácil dejarse llevar por la depresión en días nublados, en entornos cerrados y pequeños considerando el frío que no deja salir a ningún lugar. Pero eso no importa si sabes que es realmente momentáneo, que se vienen cielos brillantes para tus próximos días.

Un día más, me puse rumbo a Sierra Nevada, después de varios intento para ir acompañado, no hubo suerte y una vez más caminosolo. No puedes evitar sentirte cautivado cuando te levantas a las cinco de la mañana para ir a realizar una actividad en la montaña, si le añadimos el nerviocismo que se siente al ir solo y que se trata de una actividad compleja, graduada como PD+, da como resultado un día de nuevas vivencias.
A las ocho de la mañana, en los aparcamientos de la Hoya de la Mora, el termómetro del coche marcaba un grado bajo cero en un cielo despejado, el viento ayudaba a que la sensación de frio fuera mayor. En el veredón, alcancé a una pareja que se dirigía al mismo lugar que yo, por suerte para mí, no tuvieron ningun inconveniente en que me uniera a ellos, pues ya habian estado varias veces y conocian bien el trazado a seguir, además de ir bien equipados. Entrar en el Corral del Veleta, es impresionante, dejas atras la civilizacion y te aventuras en un lugar "ambientado". La travesía hacia el "canuto" es de "valientes". He aprendido mucho de Manolo y Paco, me ha agradado mucho su amabilidad y gratitud. Gracias ha que iban equipado con cuerdas, friends, fisureros y experiencia me he sentido en todo momento muy seguro y concentrado, pero sin poder disimular mi alegría en cada paso. La salida del canuto la hemos realizado por la Fidel Fierro, nos hemos encordado, para mayor seguridad, toda la actividad muy fluida y enriquezedora. Es sorprendente como actividdes difíciles se convierten en fáciles sin ser consciente de ello, donde se demuestra una vez más que la compañía en la montaña es muy importante.