Ideas para tu negocio: Carreras por montaña.

El dinero es muy goloso, la codicia muy mala y la bondad del corredor demasiado grande...

No suelo aprovechar el blog para fines extradeportivos, pero en esta ocasión voy hacer una excepción. Vayamos por parte, primero hay que dejar claro que para mi el deporte es un bien social y un servicio que deben dar los ayuntamientos, diputaciones u organismo público, no es un capricho, es tan necesario como tener un hospital, carreteras o escuelas, es parte de la sociedad actual, que no te engañen con móviles, redes inalámbricas, televisiones y programas basuras. Como vivimos en el momento de la mercantilización y la privatización generalizada en todo el mundo, el deporte, seguramente la cultura más antigua y bastante castigada por sus ídolos, tampoco se libra de esta negra oleada que azota el mundo. Parece ser que desde el sector público no hay dinero para mantener gimnasios, áreas deportivas u organizar eventos, así que han pasado a primer plano, otros tipos de sociedades, las privadas. Yo personalmente, soy inocente y más ignorante, seguramente porque me quede en la niñez, pensaba que los club eran organizaciones sin fines de lucro, pensaba que sus responsables eran personas con ideales como desarrollo de actividades físico deportivas, fomentar, promocionar y divulgar la idea del ejercicio físico y del deporte en general además de formar deportistas. Esto no es apología política, son hechos tan simple como pagar por correr en la pista del Polideportivo Municipal Fernándo Ruíz Hierro, comercializar con ropa deportiva del club o que los elegidos por el club no sean locales y vivan a 200 kilómetros.

Ruta realizada con mi amigo David, Arenas - La Maroma - Arenas, unos 60 kilómetros.

Lo segundo es que con la crisis aumentan las personas que realizan actividades físicas, concretamente el "salir a correr" es una de ellas, que ahora lo llaman "runing" para que parece más sofisticado y tengas que llevar un "aifon" en el brazo, medias en las piernas, unas zapatillas de colorines más "cul" y un "personal trainer", pues el tiempo libre se multiplica y la desconexión mental es obligada para sentirse mejor con tanta presión. Así que para bien o para mal, podemos afirmar que correr esta de moda. Lo siguiente a llevar un tiempo corriendo, son las carreras. Una carrera tiene muchas cosas enriquecedoras, una de ellas y para mi la más importante es la convivencia de correr en grupo, pero el precio de las carreras de montaña empieza a ser desorbitado y se aleja del concepto lúdico y se acerca al negocio o en algunos caso, al mercadeo. El que no quiera verlo, sus razones tendrá, pero cobrar el kilómetro de una carrera a más de 1 euro o vender las fotos de dicha carrera o justificar el precio de la inscripción con una "lujosa" bolsa del corredor, me parece que no contrubuyen a dar la mejor imagen. Teniendo en cuenta que los patrocinadores son multinacionles en muchos casos, además de patronatos o federaciones, da la sensación de que alguien quiere hacer negocio con todo esto y yo no pretendo formar parte de algo que apesta.

La tercera razón para escribir esta entrada es que estamos es la semana del UTMB, seguramente la carrera por montaña más famosa del mundo. Desde su primera edición en 2003, ha visto un éxito impresionante con 700 corredores inscritos y después 1600 el segundo año. Desde 2005, por razones de seguridad y medioambientales la participación en el UTMB ha tenido que ser limitada a 2.500 corredores y a pesar de todo se completan en menos de ocho minutos, aguardando miles de persona un sorteo para ver si le toca poco menos que la lotería. Su inscripción ronda los 150 euros, si ha eso le sumamos las carreras que has tenido que correr anteriormente para conseguir los puntos, viaje a Ginebra, traslado a Chamonix, estancia en hoteles, seguros y licencia federativa de tipo C... hacen unas cifras a tener en cuenta. La principal razón de los que participan en esta prueba valoran los fascinantes paisajes del Mont Blanc, pero resulta que no es un montaje, el paisaje es tan real que permanece allí todo el año para ser visitado. Me encanta que corredores como Kilian Jornet o Anton Krupicka hayan dejado de correr este tipo de carreras, pero lo que más valoro es que cada vez se involucren en retos personales y no en carreras por montañas, en una entrevista que leí a Kilian Jornet en francés decía que "el trailrunning es más que correr por montaña".

Todo estas razones tienen su conexión, las carreras que puntúan para el UTMB tienen un mayor precio de inscripción, su reclamo ya sabemos cual es, cuanto más comercial y más gente mejor, realmente hay carreras que es más difícil inscribirse que correrlas, por lo tanto tienes que apuntarte cinco meses antes parar no quedarte sin plaza, pero cuidado, si te pasa algo un mes antes, no digo una semana, ya no te devuelven el importe. Lo que están consiguiendo son participantes "light", o esa es mi impresión por lo que puedo leer en multitud de blogs, con frases como "no voy a forzar mucho en esta carrera porque voy para preparar la del mes siguiente", "yo solo voy para acumular puntos para el UTMB" o lo que es peor "no pasa nada por retirarte, lo importante es presentarte en la salida" además de un montón de quejas por dureza o falta de alguna chorrada en los multitud de avituallamientos de los que disponen. Hay gente que no pisa la montaña, pero como corre, correr es un decir, un puñado de carreras, ya presume de sentimiento de montaña, sinceramente, yo creo que deporte y montaña es otra cosa... pero siempre habrá el que te diga, si no te parece bien no vayas, ese es el tipo de personaje que tiene parte de culpa de los precios de las inscripciones, pues piden más comodidades que estando en su casa, además, le encantaría ir solo a la carrera para intentar quedar primero. Eso sí, una cosa esta clara, cuando las carreras se llenen de gente corriendo sin dorsal, con un cronómetro y el que pierda paga la ronda de cervezas, a lo mejor luego ya no hay vuelta atrás...

Claramente la evolución de las carreras enseña el maldito sistema superficial y estéril en que viven las sociedades consumistas que se creen superiores porque su gente se ha idiotizado tanto que solo sirve para una cosa: consumir. Seguramente nunca seré un "trailruner", porque en mis firmas no vendrá una larga lista de carreras, sin importar el resultado final, tampoco presentaré mi currículum con mis logros de "finisher" con su tiempo finalizado. Cuando me presente en una carrera nadie me conocerá, mientras tanto seguiré disfrutando corriendo por la montaña, a veces, en compañía humana y a veces animal, pero siempre libre y porque para disfrutar de ella no me hace falta pagar.