Entrenamiento: Coriendo por el Pico Almendrón.

Realmente... ¿Somos lo que hacemos, lo que decimos, lo que creemos, lo que pensamos, lo que mostramos? No lo creo, pienso que somos lo que sentimos, algunos no lo expresan y llevan mascaras y otros son poetas de sus vidas, quien mediante el arte de las palabras escriben las paginas de su diario, o pintores que mediante los trazos en sus lienzos dibujan los caminos perseguido por el aliento que dejan sus sentimientos. Expresarnos es una de nuestras principales funciones en la vida. No todos tenemos unas excelentes capacidades líricas o el don de encontrar las palabras entre nuestros labios, aveces nos falta el coraje de mostrar con palabras nuestras emociones, nuestros sentimientos, pero debemos ser valientes para dejarlos fluir a través de nuestros sentidos, dejandonos guiar por nuestros impulsos, de esta forma seremos capaces de sacarlos. Para algunos es mas fácil suprimirlos o esconderlos, obviando así la mágica capacidad que diferencia una persona de un ser humano, el poder sentir. Sentir es sinónimo de tener, si sientes algo, es tuyo, nadie puede robártelo o sacártelo, lleva tu sello, es único, es tu instinto. La sangre que corre por tus venas debe salir, debes dejar que tus piernas te lleven donde el instinto quiera romper con las normas, aquellas que están hechas por los hombres, están sujetas a valores morales y estéticos, lo bueno y lo malo visto desde la sociedad, del aparente ser perfecto. El único defecto es ser perfecto, la perfección es la mas grande imperfección, nuestros defectos nos hacen únicos. Pero la perfección no existe, es un error, la meta es el propio camino, el destino puede variar, hay que sentir y vivir cada paso. Tienes que seguir a tu instinto, nuestro instinto es esa voz interior que nos insta a seguir nuestro verdadero camino, es esa luz que nos guía, que nos marca el rumbo correcto en nuestras vidas. El apoyarnos en nuestro instinto nos da el sustento y valor necesario para emprender nuestro camino con confianza y seguridad. Nunca temas seguirlo, nunca temas dejar cosas que quieras por él, te llevará a cosas que querrás más, nunca temas a tu Instinto, nunca. Es el impulso de nuestro corazón que nos llama a emprender nuestro camino por la senda correcta, la inclinación de nuestro Ser en comunión con nuestra naturaleza. No tengas miedo, despliega tus alas y lánzate al vacío de la plena Confianza en tu propia naturaleza

La ruta que he realizado la he comenzado en las Cuevas de Nerja por la pista forestal paralela al Barranco de las Coladillas hasta el área recreativa del Pinarillo, seguimos por el carril hasta que éste llega a coincidir con el arroyo y el comienzo del Barranco de los Cazadores por donde se puede subir al Navachica, El Cielo o El Almendrón. Yo continuo por la pista en dirección a la Fuente del Esparto, un desvio a la izquierda en fuerte subida nos lleva a la Cuesta de los Galgos, un sendero por donde empezamos a ganar altura paulatinamente a traves de una espesa maleza espinosa que a veces nos superaba en altura. El primer repecho al que llegamos es el Collado de la Terriza (1.120 m.) con espectaculares vistas sobre los Tajos de la Soledad que caen a plomo sobre el Barranco de los Cazadores, donde también se puede apreciar el sendero de subida por dicho barranco. Seguimos subiendo y llegamos a la Camatocha (1.311 m.), una pequeña explanada en las alturas, con unas impresionantes vistas a ambos lados de los barrancos, siendo las que dan al río Chillar las más espectaculares. Bordeamos el Almendroncillo por la derecha por un sensacional paso llamado La Puerta que también bordea la base del Almendrón y nos invita a coronar su cumbre por una fina arista. El tramo final de subida al Pico Almendrón, se pierde entre areniscas y pedreras, pero no tiene más secreto que continuar la arista que une Los tajos del Sol con nuestro destino. Las vistas de este pico son una de las más espectaculares de toda la Sierra, alzado en mitad de dos grandes barrancos como el de Los Cazadores y el del Río Chillar (800 metros) y con vistas al Cerro del Cisne, Navachica o Piedra Sillada, es un autentico placer su visita. La vuelta la he realizado por el mismo lugar, ya que considero que es más favorable para correr por aquí que por el Barranco de los Cazadores. Como viene siendo costumbre, cuando describo una ruta, es porque la he grabado en el gps, para ver datos como los 26 kilómetros que componen la ruta, como los 1.650 metros de D+, pero mejor verla en el canal de wikiloc.

Pista forestal hsta la Fuente del Esparto.

Vereda hacia el Collado de la Terriza 1.120 m.

Desde La Camatocha 1.311 m. Almendrón y Barranco.

Paso de la Puerta, con el Almendroncillo y Almendrón.

La niebla me fastidio las vistas en el tramo final.

En la cima de El Almendrón con el buzón (1.514 m.).